Esta es tu historia Rex
- Clau L.
- hace 4 minutos
- 3 Min. de lectura
Esta es la historia de cualquier perrito mestizo sin suerte, o con la mala suerte de llegar a lugar menos indicado.
Esta es una historia triste y fuerte.
Esta es una denuncia de maltrato animal.
Una historia que podemos ser testigos silenciosos, y sin darnos cuenta estamos dejando en peligro a pequeños indefensos que no pueden ni siquiera hablar.
Esta puede ser la historia de una familiar o amigo cercano.
De un buen hijo o vecino. Pero que no sabe que es un maltratador de mascotas.

Hace no mucho tiempo, un cachorro llegó a una familia. ¿Los motivos? Quizás querían un perro guardián, o tal vez los hijos insistían tanto que cedieron a las suplicas sin poner las reglas antes. Sin analizar la situación de cada miembro de la familia. Sin hacer preguntas necesarias:
¿Me gustan las mascotas?
Así el perro sea de mis hijos ¿Yo seré el adulto responsable de alimentarlo y supervisar su bienestar?
¿Me gusta tener mascotas dentro de la casa o mi prioridad es el orden y limpieza?
¿Cuánto tiempo hay alguien en casa? ¿todos trabajan o estudian?
No se engañen. No fuercen situaciones que no podrán manejar más adelante.
Si no te gustan las mascotas, No adoptes.
Si no tengo dinero ni para cubrir las necesidades básicas de la familia, No adoptes.
Si no quieres recoger heces de perro o limpiar orines; si no quieres recoger zapatos rotos; si no vas a controlarte frente a los destrozos de un cachorro: No adoptes.
Si no vas a darle un espacio dentro de la casa; si no vas a tener tiempo de entrenar a un cachorro: No adoptes.
Si no estás es casa todo el día y solo quieres descansar en paz cuando regresas del trabajo: ¡NO ADOPTES!
No adoptes un perro para dejarlo en el patio encerrado o afuera en la calle, así sea en el jardín; pero afuera, pasando frio o calor.
No adoptes un perro para dejarlo amarrado a una cadena o soga, sin un trato digno, sin un mínimo de respeto por la vida animal, si no vas a poder darle cariño de familia.
No lo dejes abandonado hasta morir de hambre o frio.
No lo dejes para que muera entre su excremento.
No lo dejes abandonado hasta que muera ahorcado con la soga que le pusiste, o por una patada en un día en que todo te salió mal.
No lo mates con tu indiferencia; No lo mates porque es la única victima indefensa más cerca. No lo hagas tu victima porque no puedes resolver los problemas de tu vida.
Como podrán entender hasta aquí, el caso de Rex es un caso de la vida real. Lo "adoptaron" para dejarlo afuera, atado a una soga hasta que murió ahorcado por ella.
El creyó que eran familia; pero no lo eran.
Y yo..... yo vi todo y no hice nada.
Jonathan más que una mascota para mi, fue un maestro. Me enseñó mucho del mundo de las mascotas que hasta ahora sigo sin aprender. Todos tenemos el deber de ser guardianes de su bienestar.
A veces la simpatía por los amigos o familiares nos nubla la vista ante casos de abusos; me imagino que lo mismo ha de ser frente a los abusos de los niños.
No pude hacer nada por ti en vida Rex, pero espero que este trágico suceso de tu vida y muerte nos haga reflexionar a todos.
Vuela alto Rex y si existe la reencarnación, vuelve a una familia que te ame.




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