¿Solo queda el amor?
- Clau L.
- 3 may
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Hoy mientras tomábamos nuestro desayuno, bendito privilegio, veíamos una noticia de matrimonios poligámicos en Sudáfrica. Analizando esto, no es un escándalo en un país vecino de países islámicos, donde se ve con buenos ojos que un hombre pueda tener hasta 4 esposas.
¿Es realmente antinatural tener solo una esposa? En los países occidentales es ilegal tener más de una. Pero¿Quién cambió las reglas? El periodista dice: El nuevo testamento lo dice. "Hombre y mujer harán una sola carne"
Antes del NT la poligamia era normal pero la novedad de la exclusividad tenía que reforzarse con terminología y leyes.
El Noviazgo y el Compromiso
La ceremonia de "Dada de aros" es un rito familiar y social donde el novio entrega un "Anillo de Compromiso" a la novia. Ese acto solemne significa que ambos se Comprometen en matrimonio. El Compromiso es una garantía que a partir de ese momento ambos llegarán hasta las nupcias sin dar marcha atrás. ¿Algo más? Si. La novia, luego de la ceremonia deberá portar el anillo en señal del Compromiso y le dirá a todos que está Comprometida.
Este rito relativamente moderno viene de una necesidad de que los novios lleguen hasta las nupcias sin detracción. Antes de que se invente esta ceremonia no era necesario porque habían otros pactos.
En la larga historia y evolución del matrimonio hemos visto que las uniones entre hombres y mujeres, más que por el hecho de repoblar la tierra, eran más bien para asegurar la posesión de tierras y heredarlas a su linaje. Así vemos desde los tiempos tribales, dar a las hijas en matrimonio al dueño de muchas cabras. Un hombre anciano con otras esposas.
Las mujeres, aparte de ser piezas de cambio, eran parte fundamental de las alianzas Matrimoniales, que realmente aseguraban el Patrimonio familiar o del clan. Era necesario tener algo para intercambiar, ya sean tierras, ganado, plata, oro, etc. Todas estas alianzas durante la historia han sido el pilar de la economía de los pueblos junto con las guerras.
En la edad media se vio más claro el papel del matrimonio en la historia.
Los reyes negociaban príncipes y princesas para alargar sus fortunas.
¿Cuándo nos dijeron que había que amar al cónyuge?
Finales del siglo XVIII, inicios del XIX donde las guerras llevaban al mundo a enfrentar miserias y caídas de imperios, hay un cambio en la mentalidad y la economía, quizás una Romantizacion de las relaciones humanas. Ya no existen piezas de cambio, ni posesiones para intercambiar; pero hombres y mujeres quieren tener una vida juntos. Solo queda el amor y una promesa o "compromiso" de que será para siempre tal vez emulando a alguna pareja imperial que misteriosamente, detrás de acuerdos económicos, encontraron un gusto del uno por el otro y se amaron por siempre.
Pero ese sentido de Compromiso cada día se desvanece más en estos tiempos de imponente Relatividad.
¿Por qué sellar compromisos de amor en una sociedad de gananciales si al final de todo eso es el matrimonio?
En el derecho se conoce también al matrimonio como una simple sociedad de gananciales. Pero¿Qué pasa cuando ninguno de los Comprometidos en matrimonio tienen bienes? ¿Cuándo no hay nada de ganancia? No hay tierras ni ganado ni oro ni plata. ¿Qué damos? Damos lo único que nos queda como seres humanos: Amor.
Entonces vemos en esta larga y triste historia del matrimonio que nunca fue amor. Solo fueron gananciales que hemos romantizado un poco por necesidad otro por obligación. Lo que desde el inicio solo fue un acto comercial y poligámico, hoy es un contrato exclusivo en el cuál debe asegurarse amor genuino para su continuidad.
¿Se puede vivir exclusivamente con una sola persona por el resto de la vida sin moneda de cambio?
El Amor como Desición
Mi hija me decía que solo elegir la desición de amar es la que hace posible un compromiso verdadero.
Es verdad. Amar es una elección.
Pero en tiempos de relatividad imperante, con una inteligencia artificial que supera a la emocional, donde el Compromiso es algo Pasado de moda porque lo genuino es ser egoísta, y el amor exige mucho.... Es difícil decidir amar en exclusiva porque, además, debe ser recíproco.
Es por eso quizás que hay mucho más éxito en aquellas parejas que han decidido unirse sin ritos civiles o religiosos porque se saltaron la parte ficticia de la unión. Porque no hay nada material en juego, solo dos personas que hicieron Click por un hilo rojo real o imaginario.
Curiosamente está publicación la hago en medio de un mar de críticas a Alejandra Baigorria y Said Palao por su tremenda osadía de unirse en matrimonio escandalosamente. Tal vez la crítica no es a ellos, sino al valor de casarse en tiempos de relatividad.
Si el amor entre novios es eterno o pasajero no lo sabremos. Si podemos amar solo a una persona o a muchas, tampoco, aunque la ciencia y Sagrado Qoran expliquen la naturaleza humana.
Quedará el amor como algo bonito de todos modos. Algo que impulsa a cometer locuras y también, por fuerza, a entregar los bienes propios en favor de la familia, producto de la unión, con o sin contrato matrimonial.
Aparentemente, el matrimonio ha evolucionado positivamente, ya que ha puesto como base al amor y no a los bienes económicos, que de darse, serán para el bien de todos los miembros del hogar fundado. Viéndolo así, el matrimonio sigue siendo una ganancia.
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